lunes, 31 de diciembre de 2012

Terapia de Reemplazo Hormonal para Combatir la Osteoporosis, ¿Si o No)

El cuerpo de una mujer produce menos estrógenos durante y después de la menopausia por el cese de la actividad ovárica, lo cual afecta a la resistencia de los huesos. La terapia de reemplazo hormonal reemplaza esta pérdida hormonal.

Terapia de Reemplazo Hormonal para Combatir la Osteoporosis, ¿Si o No)
Terapia de Reemplazo Hormonal para Combatir la Osteoporosis, ¿Si o No)a


Basados en estudios preliminares, muchos médicos solían creer que la terapia de reemplazo hormonal podría ser beneficiosa para tratar los síntomas de la menopausia y, además, reducir el riesgo de enfermedad cardíaca y fracturas óseas causadas por osteoporosis.

Sin embargo, los resultados de un estudio llamado Iniciativa de Salud para las Mujeres (Women's Health Initiative, WHI), ha llevado a los médicos a revisar sus recomendaciones sobre esta terapia.

La WHI, iniciada en 1993, registró a 161.809 mujeres con edades de entre 50 a 79 años, en 40 centros médicos diferentes. El estudio se proponía examinar los beneficios y riesgos para la salud de la terapia de reemplazo hormonal, incluyendo los riesgos de cáncer de mama, ataques cardíacos, accidente cerebrovascular y enfermedad tromboembólica.

Los estudios realizados por la WHI mostraron que las mujeres que realizaban terapia de reemplazo hormonal tenían 34% menos fracturas de cadera y 24% menos fracturas generales que las mujeres que no recibían las hormonas. Sin embargo, se observó un aumento del 26% en el cáncer de mama en mujeres que tomaban las hormonas, al igual que un incremento de los ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares y enfermedad tromboembólica, lo que ha causado la suspensión del estudio.

Otro motivo que hace que el beneficio de la terapia de reemplazo hormonal sea muy cuestionable es el hecho de que aunque se pueda afirmar que esta terapia ha demostrado utilidad para la prevención de la pérdida ósea, un año después de haber suspendido el tratamiento, tanto la densidad mineral ósea, como el riesgo de fractura a más largo plazo se iguala al de las mujeres que no han sido tratadas nunca.

lunes, 17 de diciembre de 2012

Diagnóstico de La Osteoporosis

El diagnóstico de osteoporosis se establece con la realización de una densitometría ósea.



Diagnóstico de La Osteoporosis
Diagnóstico de La Osteoporosis



El método más utilizado por su precisión y fiabilidad es la absorciometría radiológica de doble energía (DXA), que consiste en la utilización de dosis bajas de rayos X para observar un área del cuerpo en búsqueda de señales de pérdida de minerales o debilitamiento óseo. 

Las zonas de medición más habituales son la columna lumbar y el cuello del fémur, pero se puede valorar la densidad mineral ósea de cualquier región. 

Otras técnicas de medición de la densidad ósea, como ultrasonidos, tomografía axial computarizada o radiología digitalizada tienen un uso más limitado. 

En cuanto a las exploraciones radiológicas, sólo permiten diagnosticar los casos avanzados de la enfermedad. Se estima que en una radiografía sin fractura, para que se sospeche la existencia de osteoporosis debe existir una pérdida de masa ósea superior al 30 por ciento. 

La medición de la cantidad de calcio en la orina puede brindar alguna evidencia del aumento del trastorno óseo, pero su valor es limitado.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Tipos de Osteoporosis

Osteoporosis primarias: son los casos de osteoporosis en los que no se identifica ninguna enfermedad que la justifique directamente.


Tipos de Osteoporosis
Tipos de Osteoporosis

  1. Osteoporosis idiopática juvenil
    Son casos raros que se inician generalmente entre los 8 y los 14 años y se caracteriza por la aparición brusca de dolor óseo y de fracturas con traumatismos mínimos. En muchos casos remite de forma espontánea.
  2. Osteoporosis idiopática del adulto joven
    Se observa en hombres jóvenes y mujeres premenopáusicas en los que no se encuentra causa que la justifique.
  3. Osteoporosis postmenopáusica o tipo I.
    Aparece en mujeres postmenopáusicas de 51 a 75 años y se caracteriza por la pérdida acelerada y desproporcionada de hueso trabecular (esponjoso). Las complicaciones más frecuentes son las fracturas de los cuerpos vertebrales (columna) y de la porción distal del radio (antebrazo). - 
  4. Osteoporosis senil o tipo II. Se detecta en algunas mujeres y varones de más de 70 años como consecuencia de un déficit de la función de los osteoblastos. Otros factores que pueden conducir a este tipo de osteoporosis son el sedentarismo-inmovilización, la peor absorción intestinal de calcio, menor exposición a la luz solar y trastornos nutricionales que ocasionan déficit de vitamina D e hiperparatiroidismo secundario. Las complicaciones más frecuentes son las fracturas de cuello femoral (muslo), porción proximal del húmero (brazo) y pelvis.
Osteoporosis secundarias: son los casos de osteoporosis que son una consecuencia o una manifestación acompañante de otras enfermedades o de su tratamiento (enfermedades endocrinológicas, enfermedades gastrointestinales, enfermedades reumáticas, fármacos, etc.).

lunes, 5 de noviembre de 2012

La Osteoporosis y Las Fracturas

La osteoporosis, considerada a menudo una enfermedad de evolución lenta, puede progresar con rapidez después de la primera fractura. Por este motivo, la prevención de la primera fractura es crucial para evitar una cascada de fracturas. Las fracturas son factores de riesgo por sí mismas para fracturas futuras. Una fractura por fragilidad es el principal indicador de que en el futuro se padecerá otra fractura: el riesgo de sufrir otra fractura de cualquier tipo en el año siguiente aumenta de dos a cinco veces.



Las fracturas de cadera constituyen el tipo más grave de fracturas por fragilidad. Son especialmente discapacitantes junto con las fracturas vertebrales. Las localizaciones más frecuentes de las fracturas osteoporóticas son la cadera, la columna vertebral, el antebrazo y el hombro.

El mayor riesgo de la osteoporosis son las fracturas y la mayoría de las fracturas son el resultado de una caída. Este es uno de los motivos por los cuales el ejercicio físico es fundamental para personas con osteoporosis: una buena práctica de ejercicio permite, no sólo gozar de más salud general, sino de más fuerza, equilibrio y coordinación, imprescindibles para reducir el riesgo de caídas, que constituyen el verdadero caballo de batalla de la enfermedad.

lunes, 22 de octubre de 2012

El Tabaco y El Alcohol en La Osteoporosis

Es muy importante abandonar el hábito de fumar, en caso de hacerlo, ya que las personas fumadoras, especialmente mujeres, tienen una menor densidad mineral ósea y una mayor velocidad de pérdida ósea que las no fumadoras. En varones fumadores también se ha visto una mineralización menor.

El Tabaco y El Alcohol en La Osteoporosis
El Tabaco y El Alcohol en La Osteoporosis


El mecanismo explicativo podría ser múltiple: los fumadores suelen tener menor peso corporal y mayor consumo de alcohol y cafeína. Además, las mujeres fumadoras tienen la menopausia más temprana que las no fumadoras.

También se debe limitar el consumo de alcohol, ya que el exceso de alcohol puede causar daño a los huesos. En el alcoholismo crónico hay una reducción de la densidad mineral ósea tanto por efecto tóxico directo sobre los osteoblastos como por la malnutrición habitualmente asociada, además de haber un alto riesgo de fracturas ante la mayor frecuencia de caídas.

Así que está claro, si nuestros hábitos de vida no son saludables, hay que cambiarlos por el bien de la salud de nuestros huesos: una dieta equilibrada (rica en calcio y vitamina D), mayor actividad física, no fumar y no abusar del alcohol.

sábado, 20 de octubre de 2012

¿Podré Tener Osteoporosis?

OSTEOPOROSIS - CUESTIONARIO DE FACTORES DE RIESGO EN UN MINUTO

En la actualidad se estima que 3,5 millones de personas padecen osteoporosis en España, de las cuales sólo están diagnosticadas el 18%, esto significa que el 82% de los posibles afectados desconocen que lo están.

Las mujeres posmenopáusicas son las tienen mayor “riesgo” y suelen desconocerlo.

Para ayudar a las personas a conocer su riesgo personal de presentar fracturas por fragilidad y para fomentar la introducción de medidas adecuadas, la IOF (International Osteoporosis Foundation) ha desarrollado un cuestionario sencillo y realizado por la propia persona: el Cuestionario de Factores de Riesgo en un Minuto. 

Nota importante: si contesta “sí” a una o más preguntas, no implica necesariamente que padezca osteoporosis, sino que debe consultar a su médico para obtener más información sobre su estado.

Cuestionario de Factores de Riesgo Osteoporosis
Cuestionario de Factores de Riesgo Osteoporosis

lunes, 8 de octubre de 2012

La Dieta en La Osteoporsis

Se debe mantener una dieta rica en calcio, fósforo, vitamina D y proteínas. Aunque esto no detendrá completamente la pérdida ósea, garantizará la disponibilidad de los materiales que el cuerpo utiliza para la formación y mantenimiento de los huesos.

Espinacas ricas en Calcio
Espinacas ricas en Calcio


CALCIO 

En varones las recomendaciones de ingestas cálcicas suelen ser bastante constantes (800-1.000 mg/día). En algunas etapas como la adolescencia se elevan a 1.200 mg/día y 1.500 mg/día en los ancianos.

En mujeres las recomendaciones son mayores: 1.200-1.500 mg/día en postmenopáusicas, gestantes y lactantes. Estas recomendaciones implican elevados consumos de leche y derivados.

Los suplementos de calcio se deben tomar en la medida de lo necesario para alcanzar el nivel de ingesta diario recomendado, especialmente en mujeres postmenopáusicas, aunque hay autores que no son partidarios de ello, porque la suplementación puede tener efectos adversos.

Los alimentos ricos en calcio incluyen leche baja en grasa, yogur, helados y queso, tofu, salmón y sardinas y vegetales de hoja verde, como espinacas y col rizada.


Huevos
Huevo



FÓSFORO

La relación alimentaria calcio/fósforo debiera ser superior o similar a 1. Esta proporción sólo se da en la leche y derivados.

Las recomendaciones de fósforo son de unos 700-800 mg/día en adultos pero se elevan a unos 1.200 mg/día en la adolescencia ya que el fósforo es necesario en los periodos de rápido crecimiento óseo.

Las alimentaciones occidentales suelen contener elevadas cantidades de huevos, carne, pescado y lácteos, con importante aporte de fósforo y proteínas.


Vitaminas
Vitaminas



VITAMINA D

La vitamina D ayuda en la absorción del calcio y todos los individuos con aumento del riesgo de deficiencia de calcio y osteoporosis deben tomar de 400 a 800 UI por día.

miércoles, 30 de mayo de 2012

Salud para los huesos de por vida

¿Por qué es importante la salud de los huesos?

Ilustración de madre e hija compartiendo un helado.
Los huesos nos dan soporte y nos permiten movernos. Protegen de lesiones al cerebro, al corazón y a otros órganos. Además, los huesos almacenan minerales tales como el calcio y el fósforo, los cuales nos ayudan a mantener los huesos fuertes, y los liberan a otros órganos cuando estos los necesitan para otros usos.
Existen muchas cosas que podemos hacer para mantener los huesos sanos y fuertes. Consumir alimentos ricos en calcio y vitamina D, hacer suficiente ejercicio y tener hábitos saludables ayuda a mantener los huesos sanos.
Si no comemos bien y no hacemos suficiente ejercicio del tipo adecuado, los huesos pueden debilitarse e incluso romperse. Cuando los huesos se rompen (lo que se conoce como fractura) pueden causar mucho dolor y ocasionalmente se requiere cirugía para repararlos. También pueden causar otros problemas de salud por largo tiempo.
Sin embargo, la buena noticia es que nunca es demasiado tarde para cuidar nuestros huesos.

    ¿Qué es la osteoporosis?

    Existen muchos tipos de enfermedades óseas. La más común es la osteoporosis. Con la osteoporosis los huesos se debilitan y tienen más probabilidad de fracturarse. Las personas con osteoporosis frecuentemente sufren fracturas de los huesos de las muñecas, la columna y la cadera.
    Nuestros huesos están vivos. Todos los días, nuestro cuerpo reemplaza las células viejas en el hueso y fabrica hueso nuevo en su lugar. A medida que envejecemos, los huesos se degradan más rápido de lo que los reponemos. Es normal que perdamos algo de hueso en la vejez. Pero, si no tomamos medidas para mantener los huesos sanos, podemos perder demasiado hueso y sufrir de osteoporosis.
    Muchas personas tienen huesos débiles y no lo saben. Eso se debe a que por lo general la pérdida de hueso ocurre a largo plazo y no duele. Para muchas personas, un hueso roto es el primer signo de que tienen osteoporosis.
    Las personas con osteoporosis frecuentemente sufren fracturas de los huesos de las muñecas, la columna y la cadera.
    Ilustración de un cuerpo entero con tres imágenes detalladas de los huesos de la columna, las muñecas y la cadera.

    ¿Quién padece de osteoporosis?

    Hay muchas cosas que pueden aumentar la probabilidad de tener osteoporosis. Estas cosas se conocen como "factores de riesgo". Algunos factores de riesgo se pueden controlar y otros están fuera de nuestro control.

    Factores de riesgo que se pueden controlar

    Ilustración de una mujer haciendo compras en el mercado
    • Dieta. Cuando se ingiere muy poco calcio se puede aumentar la probabilidad de padecer de osteoporosis. Si no se obtiene suficiente vitamina D se puede aumentar también el riesgo de padecer la enfermedad. La vitamina D es importante porque le ayuda al cuerpo a usar el calcio de la dieta.
    • Actividad física. No hacer ejercicio y mantenerse inactivo por largos periodos de tiempo puede aumentar la probabilidad de padecer de osteoporosis. Al igual que los músculos, los huesos se vuelven más fuertes (y se mantienen más fuertes) con el ejercicio habitual.
    • Peso corporal. Mantenerse demasiado bajo peso aumenta la probabilidad de tener osteoporosis.
    • El hábito de fumar. El cigarrillo puede evitar que el cuerpo use el calcio de la dieta. Además, las mujeres que fuman llegan a la menopausia más pronto que las que no fuman. Esto puede aumentar el riesgo de osteoporosis.
    • Alcohol. Las personas que beben mucho tienen más probabilidad de padecer de osteoporosis.
    • Medicamentos. Ciertos medicamentos pueden causar pérdida ósea. Entre estos están los glucocorticoides, que son medicamentos que se les recetan a las personas que tienen artritis, asma y muchas otras enfermedades. Otros medicamentos para prevenir las convulsiones, para tratar la endometriosis (una enfermedad del útero) y el cáncer, también pueden causar pérdida de los huesos.
    Ilustración de una maestra dándole consejos de temas de salud a un niño

    Factores de riesgo que no se pueden controlar

    • Edad. La probabilidad de padecer de osteoporosis aumenta a medida que envejecemos.
    • Sexo. Si usted es mujer, tiene mayor probabilidad de padecer de osteoporosis. Las mujeres tienen huesos más pequeños que los hombres y pierden hueso más rápido que ellos, debido a los cambios hormonales que ocurren después de la menopausia.
    • Raza. Las mujeres de raza blanca y las asiáticas tienen mayor probabilidad de padecer de osteoporosis. Las mujeres hispanas y las afroamericanas también corren riesgo, pero es menor.
    • Antecedentes familiares. Tener un miembro de la familia cercana con osteoporosis o que se haya fracturado un hueso, podría también aumentar el riesgo.

    ¿Corro realmente riesgo?

    Debido que hay más mujeres que hombres que tienen osteoporosis, muchos hombres piensan que no corren riesgo de padecer la enfermedad. Muchas mujeres hispanas y afroamericanas tampoco se preocupan de sus huesos. Creen que la osteoporosis es solo un problema de las mujeres blancas. Sin embargo, es un riesgo real para las mujeres y los hombres mayores de cualquier origen.
    Además, las personas con ciertos antecedentes raciales pueden tener más probabilidad de sufrir otros problemas de salud que aumentan el riesgo de perder hueso. Si usted tiene alguno de estos problemas de salud, hable con su médico sobre la salud de sus huesos:
    • Alcoholismo
    • Anorexia nerviosa
    • Asma o alergias
    • Cáncer
    • Enfermedad de Cushing
    • Diabetes
    • Hiperparatiroidismo
    • Hipertiroidismo
    • Enfermedad intestinal inflamatoria
    • Intolerancia a la lactosa
    • Lupus
    • Enfermedad hepática o renal
    • Enfermedad pulmonar
    • Esclerosis múltiple
    • Artritis reumatoide.

    ¿Cómo puedo saber si tengo osteoporosis?

    Ilustración de un paciente que recibe una prueba de densidad ósea Dado que la osteoporosis no ocasiona ningún síntoma hasta que se fractura un hueso, es importante que hable con su médico sobre la salud de sus huesos. Si el médico considera que usted tiene riesgo de osteoporosis, le puede ordenar una prueba de densidad ósea. La prueba de densidad ósea mide qué tan fuertes o densos son sus huesos y si usted tiene osteoporosis. También puede indicar qué probabilidad tiene de fracturarse un hueso. La prueba de densidad ósea es rápida, segura e indolora.

    ¿Qué puedo hacer para tener huesos más sanos?

    Nunca es demasiado pronto ni demasiado tarde para cuidar sus huesos. Los siguientes pasos le pueden ayudar a mejorar su salud ósea:
    • Consuma una dieta bien balanceada y rica en calcio y vitamina D. Las buenas fuentes de calcio incluyen productos lácteos bajos en grasa y alimentos y bebidas con calcio agregado. Buenas fuentes de vitamina D incluyen yemas de huevo, pescado de mar, hígado y leche con vitamina D agregada. Algunas personas pueden necesitar suplementos nutricionales para obtener suficiente calcio y vitamina D. El segundo cuadro muestra qué tanto calcio y vitamina D necesita cada día. Las frutas y verduras también contribuyen con otros nutrientes que son importantes para la salud ósea.

    Fuentes de calcio:

    • Tofu (fortificado con calcio)
    • Leche de soya (fortificada con calcio)
    • Verduras de hojas verdes (por ejemplo, brócoli, coles de Bruselas, hojas de mostaza, col rizada)
    • Col o repollo chino
    • Fríjoles o legumbres
    • Tortillas
    • Sardinas o salmón con huesos comestibles
    • Camarones o langostinos
    • Jugo de naranja (fortificado con calcio)
    • Pizza
    • Pan
    • Nueces o almendras
    • Productos de leche (leche, queso, yogur)

    Cantidades recomendadas de calcio y vitamina D
    Grupo de edad o etapa de la vida Calcio (mg por día) Vitamina D (UI por día)
    Bebés de 0 a 6 meses 200 400
    Bebés de 6 a 12 meses 260 400
    1 a 3 años 700 600
    4 a 8 años 1,000 600
    9 a 13 años 1,300 600
    14 a 18 años 1,300 600
    19 a 30 años 1,000 600
    31 a 50 años 1,000 600
    51 a 70 años, hombres 1,000 600
    51 a 70 años, mujeres 1,200 600
    Más de 70 años 1,200 800
    14 a 18 años, embarazadas/amamantando 1,300 600
    19 a 50 años, embarazadas/amamantando 1,000 600
    Definiciones: mg = miligramos; UI = Unidades Internacionales
    Fuente: El Comité de Nutrición y Alimentos, Instituto de Medicina, Academia Nacional de las Ciencias, 2010.

    Ilustración de gente haciendo ejercicio
    • Haga mucha actividad física. Al igual que los músculos, los huesos se ponen más fuertes con el ejercicio. Los mejores ejercicios para los huesos sanos son los ejercicios de resistencia y carga, como caminar, subir escaleras, levantar pesas y bailar. Trate de hacer 30 minutos de ejercicio al día.
    • Lleve un estilo de vida saludable. No fume, y si decide tomar alcohol, no lo haga en exceso.
    • Hable con el médico sobre su salud ósea. Repase sus factores de riesgo con el médico y pregúntele si debe hacerse una prueba de densidad ósea. Si es necesario, el médico puede ordenarle medicamentos para ayudar a prevenir la pérdida de los huesos y reducir su probabilidad de fracturas.
    • Evite las caídas. Las caídas pueden causar la fractura de un hueso, especialmente si se tiene osteoporosis. Sin embargo, la mayoría de las caídas se pueden prevenir. Revise su hogar en busca de peligros como alfombras arrugadas o sueltas y mala iluminación. Hágase un examen de la vista. Mejore su equilibrio y fuerza caminando todos los días y tomando clases de Tai Chi, yoga o baile.

    ¿Necesito tomar medicamentos para mis huesos?

    Existen medicamentos que ayudan a prevenir y tratar la osteoporosis. Su médico puede indicarle que tome medicamentos si la prueba de densidad ósea muestra que sus huesos están débiles y usted tiene una buena probabilidad de fracturarse un hueso en el futuro. Es muy probable que le prescriba medicamentos si usted tiene otros problemas de salud que aumenten su riesgo de una fractura, como por ejemplo, tendencia a las caídas o bajo peso corporal.

    ¿Cómo puedo ingresar a un estudio de investigación?

    Los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) conducen estudios de investigación en todo el país, en los cuales los pacientes participan como voluntarios. Estos estudios ayudan a descubrir nuevos factores de riesgo y tratamientos para la osteoporosis y otras enfermedades.
    Ilustración de un hombre y una mujer haciendo investigación en la computadora La participación en un estudio de investigación trae muchos beneficios, como por ejemplo, obtener atención médica adecuada sin ningún costo y, en algunos casos, ayuda con gastos de transporte y otros. Además, un equipo de expertos atiende a los voluntarios del estudio, que a menudo están entre los primeros en recibir nuevos tratamientos, antes que el público en general. Muchos voluntarios toman parte en la investigación simplemente porque quieren ayudar a otros con la misma enfermedad, tanto hoy como en el futuro.

    Prueba de la Densidad Ósea: Lo Que Significan Los Números

    ¿Qué es una prueba de la densidad ósea?

    Una prueba de la densidad mineral ósea (BMD, por sus siglas en inglés) es la mejor manera de determinar la salud de los huesos. La prueba puede identificar la osteoporosis, determinar el riesgo que usted corre de fracturarse un hueso y medir cómo usted responde a un tratamiento para la osteoporosis. La prueba de la densidad mineral ósea más usada se llama DXA o absorpciometría de rayos X de doble energía. Esta prueba no causa ningún dolor, es similar a una prueba de rayos X normal y puede medir la densidad ósea de su cadera o columna vertebral.

    Densidad Osea, Osteoporosis
    Densidad Osea, Osteoporosis

    ¿Qué hace esta prueba?

    Una prueba DXA mide su densidad mineral ósea, la compara con la de una norma establecida o estándar y le da a usted una calificación. Aunque ninguna prueba de la densidad ósea es cien por ciento exacta, ésta es la mejor forma de poder predecir si una persona va a fracturarse un hueso en el futuro.

    Calificación T

    Generalmente, los resultados de su DXA se comparan con la densidad ósea óptima o pico de un adulto de 30 años de edad en buen estado de salud y usted recibe una calificación T (T score). Una calificación de 0 significa que su densidad mineral ósea (BMD) es igual a la normal de un adulto joven sano. La diferencia entre su BMD y la de un adulto joven sano se mide en unidades llamadas desviaciones estándar (DE). Cuantas más desviaciones estándar por debajo de 0, indicadas con números negativos, más baja es su densidad ósea y mayor su riesgo de fractura.
    Como puede verse en el cuadro siguiente, una calificación T entre +1 y –1 se considera normal o saludable. Una calificación T entre –1 y –2.5 indica que usted tiene una densidad ósea baja, aunque no lo suficientemente baja como para tener un diagnóstico de osteoporosis. Una calificación T de –2.5 o más baja indica que usted tiene osteoporosis. Cuanto más grande es el número negativo, más grave es la osteoporosis.
    Definiciones de la Organización Mundial de la Salud
    según los niveles de densidad ósea

    Normal La densidad ósea está dentro de 1 DE (+1 ó –1) del promedio para un adulto joven.
    Baja densidad ósea La densidad ósea está entre 1 y 2.5 DE por debajo del promedio para un adulto joven (–1 a –2.5 SD).
    Osteoporosis La densidad ósea está 2.5 DE o más por debajo del promedio para un adulto joven (–2.5 SD o más baja).
    Osteoporosis grave (establecida) La densidad ósea está más de 2.5 DE por debajo del promedio para un adulto joven y han ocurrido una o más fracturas producidas por la osteoporosis.

    Calificación Z

    A veces la densidad mineral ósea de una persona se compara con la de un individuo típico de su misma edad. Esta comparación le da a usted la calificación Z. Como la densidad ósea baja es común entre los adultos mayores, las comparaciones con la densidad ósea de un individuo típico de su misma edad pueden ser engañosas. Es por esta razón que el diagnóstico de osteoporosis o de masa ósea baja se basa en la calificación T que usted haya obtenido. Sin embargo, una calificación Z puede ser útil para determinar si hay una enfermedad subyacente o una condición que esté causando la pérdida de hueso.

    La densidad ósea baja y la osteoporosis

    La información proporcionada por una prueba de densidad ósea puede ayudar al médico a decidir cuáles son las mejores opciones de tratamiento o de prevención para usted.
    Si usted tiene una densidad ósea baja, pero no lo suficientemente baja como para ser diagnosticada como osteoporosis, se denomina a veces osteopenia. La masa ósea baja puede ser causada por muchos factores como:
    • Factores hereditarios
    • El desarrollo de una masa ósea pico por debajo del nivel óptimo en la juventud
    • Una afección médica o un medicamento para el tratamiento de tal afección que perjudican los huesos
    • Una pérdida de hueso anormalmente acelerada.
    Aun cuando no todas las personas que tienen una masa ósea baja desarrollan osteoporosis, todos los que tienen una masa ósea baja corren un riesgo mayor de tener la enfermedad y las fracturas que surgen como consecuencia.
    Si tiene una masa ósea baja, usted puede tomar medidas que le ayuden a reducir la pérdida de hueso y a prevenir la osteoporosis en el futuro. El médico querrá que usted desarrolle o mantenga hábitos saludables como comer alimentos ricos en calcio y vitamina D y hacer ejercicios de sostener el propio peso, como caminar, correr o bailar. En algunos casos el médico le puede recomendar un medicamento para la prevención de la osteoporosis.
    Osteoporosis: si a usted le han diagnosticado osteoporosis, estos hábitos saludables le ayudarán, pero el médico probablemente también le recomendará que tome algún medicamento. Existen varios medicamentos eficaces para reducir la pérdida de hueso – o incluso para reversar la enfermedad. Si usted toma medicamentos para tratar la osteoporosis, el médico puede recomendarle que se haga pruebas de densidad ósea en el futuro para controlar su progreso.

    ¿Quién debe hacerse una prueba de densidad ósea?

    La Misión Especial de Servicios Preventivos en los Estados Unidos (United States Preventive Service Task Force) recomienda que las mujeres de 65 años de edad o mayores se hagan la prueba de la osteoporosis de una manera rutinaria. También recomienda que las mujeres que corren un riesgo mayor de sufrir fracturas causadas por la osteoporosis inicien estas pruebas rutinarias a partir de los 60 años.
    Además, una comisión de expertos convocada por los Institutos Nacionales de la Salud en el año 2000 recomendó que se considere hacer la prueba de densidad ósea a las personas que estén tomando medicamentos glucocorticoides durante 2 meses o más y también a quienes tengan condiciones que les pongan a riesgo de tener fracturas relacionadas con la osteoporosis.
    Sin embargo, la comisión no encontró suficiente evidencia científica para basar una recomendación universal que dictara cuándo todos los hombres y todas las mujeres deberían hacerse una prueba de densidad ósea. Recomendó, en cambio, que se considere cada caso particular.
    Varias asociaciones médicas profesionales también han establecido unas pautas que indican cuándo una persona deberá hacerse una prueba de densidad ósea. Muchas de estas pautas se pueden encontrar en Internet en una base de datos establecida por el Centro Nacional de Información sobre Pautas: www.guideline.gov.

    Haga ejercicio para tener huesos sanos

    Hacer ejercicio a cualquier edad es vital para tener huesos sanos, y es fundamental para la prevención y el tratamiento de la osteoporosis. El ejercicio no solamente mejora la salud de los huesos, sino que también aumenta la fuerza muscular, la coordinación y el equilibrio y contribuye a mejorar la salud en general.
    • ¿Por qué hay que hacer ejercicio?
    • El mejor ejercicio para fortalecer los huesos
    • Consejos al hacer ejercicio
    • Un régimen completo para combatir la osteoporosis
    • Para su información

    Ejercicio y Osteoporosis
    Ejercicio y Osteoporosis

    ¿Por qué hay que hacer ejercicio?

    Los huesos, como los músculos, son tejidos vivos que responden al ejercicio y se fortalecen. En general, las mujeres y los hombres jóvenes que hacen ejercicio con regularidad alcanzan una mayor densidad ósea (el nivel más alto de consistencia y fuerza de los huesos) que los que no hacen ejercicio. La mayoría de las personas alcanzan el punto máximo de densidad ósea entre los 20 y los 30 años de edad. A partir de esa edad generalmente la densidad ósea empieza a disminuir. Las mujeres y los hombres mayores de 20 años pueden ayudar a prevenir la pérdida ósea hacienda ejercicio con frecuencia. El ejercicio físico nos permite mantener la fuerza muscular, la coordinación y el equilibrio, lo que a su vez ayuda a prevenir las caídas y las fracturas. Esto es especialmente importante para los adultos de edad avanzada y para las personas que han sido diagnosticadas con osteoporosis.

    El mejor ejercicio para fortalecer los huesos

    El mejor ejercicio para los huesos es el que requiere sostener el propio peso. Este tipo de ejercicio hace que uno se esfuerce a trabajar en contra de la gravedad. Ejemplos de estos ejercicios son: levantar pesas, caminar, hacer senderismo, correr, subir escaleras, jugar tenis y bailar. En contraste, los ejercicios que no requieren sostener el propio peso son nadar y montar en bicicleta. Aun cuando estos ejercicios ayudan a fortalecer y a mantener fuertes los músculos y reducen el riesgo de enfermedades cardiovasculares, no son los más eficaces para fortalecer los huesos.

    Consejos al hacer ejercicio

    Si tiene problemas de salud, como problemas cardíacos, tensión arterial alta, diabetes u obesidad, o si tiene 40 años de edad o más, consulte con el médico antes de comenzar a hacer ejercicio con regularidad. Según el Cirujano General, la meta óptima es hacer ejercicio durante por lo menos 30 minutos casi todos los días; preferentemente a diario.
    Préstele atención a su cuerpo. Al comenzar una rutina de ejercicios, es posible que tenga algo de dolor y malestar en los músculos, pero no debe ser muy doloroso ni durar más de 48 horas. Si esto ocurre, es posible que esté esforzándose demasiado y que necesite ir más despacio. Deje de hacer ejercicio si siente algún dolor o malestar en el pecho y consulte con el médico antes de su próxima sesión de ejercicios.
    Si tiene osteoporosis, es importante que le pregunte al médico qué actividades son seguras para usted. Si tiene una densidad ósea baja, los expertos recomiendan que se proteja la columna y que evite los ejercicios o actividades que causen flexión o torsión de la espalda. Es más, debe evitar hacer ejercicios de mucho impacto para reducir el riesgo de fracturarse un hueso. También puede consultar con un especialista del ejercicio para que le enseñe a progresar debidamente en sus actividades, a estirar y fortalecer los músculos de una manera segura, y a corregir los malos hábitos de postura. Un especialista en ejercicio físico debe tener un título en fisiología del ejercicio, educación física, fisioterapia o una especialidad similar. Asegúrese de preguntarle si está familiarizado con las necesidades especiales que tienen las personas con osteoporosis.

    Un régimen completo para combatir la osteoporosis

    Recuerde que hacer ejercicio es sólo una parte de un régimen para la prevención o el tratamiento de la osteoporosis. Al igual que una alimentación rica en calcio y vitamina D, hacer ejercicio ayuda a fortalecer los huesos a cualquier edad. Pero es posible que la buena alimentación y el ejercicio no sean suficientes para detener la pérdida de la densidad ósea ocasionada por las afecciones médicas, la menopausia o ciertos hábitos como son el uso de tabaco y el consumo excesivo de alcohol. Es importante que hable con el médico sobre la salud de sus huesos. Pregúntele si usted es candidato para una prueba de densitometría ósea. Si la densitometría muestra una densidad ósea baja, pregunte qué medicamentos podrían ayudarle a mantener los huesos sanos y combatir la osteoporosis.

    martes, 29 de mayo de 2012

    La Osteoporosis

    La osteoporosis, o huesos porosos, es una enfermedad caracterizada por baja masa ósea y deterioro estructural del tejido óseo, que conduce a la fragilidad ósea y un mayor riesgo de fracturas de la cadera, columna y muñeca. Tanto los hombres como las mujeres se ven afectadas por la osteoporosis, una enfermedad que puede prevenirse y tratarse. En los Estados Unidos, más de 40 millones de personas ya cuentan con osteoporosis o están en alto riesgo debido a la baja masa ósea.
    • ¿Cuál es el hueso?
    • Factores de Riesgo
    • Prevención
    • Los síntomas
    • Detección
    • Tratamiento
    • Prevención de caídas

    Osteoporosis
    Osteoporosis

     

    ¿Cuál es el hueso?

    El hueso está vivo. Se compone principalmente de colágeno, una proteína que proporciona un marco suave, y fosfato de calcio, un mineral que aumenta la resistencia y endurece el marco.
    Esta combinación de colágeno y calcio del hueso lo hace flexible y fuerte, lo que ayuda al hueso a soportar el estrés. Más del 99 por ciento del calcio del cuerpo se encuentra en los huesos y los dientes. El restante 1 por ciento se encuentra en la sangre.
    A lo largo de la vida, se elimina hueso viejo (resorción) y se añade nuevo hueso al esqueleto (formación).Durante los años de la infancia y la adolescencia, se añade hueso nuevo más rápido que el hueso viejo se elimina.Como resultado, los huesos se hacen más grandes, más pesados ​​y más densos. La formación de hueso supera la resorción hasta el pico de masa ósea (densidad ósea máxima y la fuerza) se alcanza aproximadamente a los 30 años.Después de ese tiempo, la resorción ósea comienza lentamente a superar la formación de hueso.
    Para las mujeres, la pérdida ósea es más rápida en los primeros años después de la menopausia, y continúa en los años post-menopáusicas. La osteoporosis-que afecta principalmente a las mujeres, pero también puede afectar a los hombres-se desarrollará cuando la resorción ósea se produce demasiado rápido o cuando la sustitución se produce muy lentamente. Es más propenso desarrollar Osteoporosis si no se alcanza una masa ósea máxima óptima durante sus años de formación de los huesos.

    Factores de Riesgo

    Ciertos factores de riesgo están relacionados con el desarrollo de la osteoporosis y contribuyen a la probabilidad de un individuo de desarrollar la enfermedad. Muchas personas con osteoporosis tienen varios factores de riesgo, pero otros que desarrollan la enfermedad no tiene factores de riesgo conocidos. Algunos factores de riesgo no se puede cambiar, pero otros si.

    Los factores de riesgo que no se pueden cambiar:

    • Género . Sus probabilidades de desarrollar osteoporosis son mayores si usted es una mujer. Las mujeres tienen menos tejido óseo y pierden hueso más rápidamente que los hombres debido a los cambios que ocurren con la menopausia.
    • Edad . Cuanto mayor sea, mayor será su riesgo de osteoporosis. Sus huesos se vuelven más delgados y más débiles a medida que envejece.
    • Tamaño del cuerpo . Pequeños y delgados de huesos, las mujeres están en mayor riesgo.
    • Raza . Las mujeres caucásicas y asiáticas tienen mayor riesgo. Las mujeres afroamericanas e hispanas tienen un riesgo menor, pero significativo.
    • Antecedentes familiares . El riesgo de fractura puede ser debido, en parte, a la herencia. Las personas cuyos padres tienen una historia de fracturas también parecen haber reducido la masa ósea y puede correr el riesgo de fracturas.

    Los factores de riesgo puede cambiar:

    • Las hormonas sexuales . La ausencia anormal de periodos menstruales (amenorrea), el nivel de estrógenos baja (la menopausia), y el nivel bajo de testosterona en los hombres puede provocar osteoporosis.
    • La anorexia nerviosa . Se caracteriza por un miedo irracional a la ganancia de peso, este trastorno de la alimentación aumenta el riesgo de osteoporosis.
    • Calcio y vitamina D . Una dieta de por vida baja en calcio y vitamina D, lo hace más propenso a la pérdida ósea.
    • El uso de medicamentos . El uso prolongado de ciertos medicamentos, como los glucocorticoides y anticonvulsivantes algunos puede conducir a la pérdida de densidad ósea y las fracturas.
    • Estilo de vida . Un estilo de vida inactivo o reposo en cama prolongado tiende a debilitar los huesos.
    • El consumo de tabaco . Fumar es malo para los huesos, así como el corazón y los pulmones.
    • La ingesta de alcohol . El consumo excesivo de alcohol aumenta el riesgo de pérdida ósea y fracturas.


    Prevención Osteoporosis
    Prevención Osteoporosis

     

    Prevención

    Para alcanzar la masa ósea máxima óptima y continuar la construcción de nuevo tejido óseo con la edad, debe tener en cuenta varios factores.
    Calcio: Un aporte insuficiente de calcio durante toda la vida contribuye al desarrollo de la osteoporosis. Muchos estudios publicados muestran que la ingesta de calcio baja parece estar asociada con una baja masa ósea, pérdida rápida de masa ósea, y las altas tasas de fractura. Las encuestas nacionales de nutrición demuestran que muchas personas consumen menos de la mitad de la cantidad de calcio recomendada para construir y mantener los huesos sanos. Las fuentes alimenticias de calcio, incluidos los bajos en grasa, los productos lácteos, como leche, yogur, queso y helados, verduras de hojas verdes, tales como el brócoli, la col rizada, bok choy, y las espinacas, las sardinas y salmón con espinas; tofu; las almendras, y alimentos fortificados con calcio, como jugo de naranja, cereales y panes. Dependiendo de la cantidad de calcio que recibe cada día de los alimentos, es posible que necesite tomar un suplemento de calcio.
    Necesidades de calcio cambian durante la vida. La demanda del cuerpo para el calcio es mayor durante la infancia y la adolescencia, cuando el esqueleto está creciendo rápidamente, y durante el embarazo y la lactancia. Las mujeres posmenopáusicas y hombres mayores también necesitan consumir más calcio. Además, a medida que envejecemos, nuestro cuerpo se vuelve menos eficiente en la absorción de calcio y otros nutrientes. Los adultos mayores también son más propensos a tener problemas médicos crónicos y al uso de medicamentos que pueden impedir la absorción de calcio.
    Consumos recomendados de calcio
    La vida-la fase de gruposmg / día
    Los bebés de 0 a 6 meses200
    Los niños de 6 a 12 meses260
    1 a 3 años700
    4 a 8 años de edad1000
    De 9 a 13 años de edad1300
    De 14 a 18 años de edad1300
    19 a 30 años de edad1000
    31 a 50 años de edad1000
    51 - a 70 años de edad, los varones1000
    51 - a 70 años de edad, las mujeres1200
    > 70 años1200
    De 14 a 18 años de edad, mujeres embarazadas / lactantes1300
    De 19 a 50 años de edad, mujeres embarazadas / lactantes1000

    Fuente: Food and Nutrition Board, Institute of Medicine, National Academy of Sciences, 2010.
    Vitamina D: La vitamina D desempeña un papel importante en la absorción de calcio y salud ósea. Las fuentes alimenticias de vitamina D incluyen yemas de huevo, pescado de agua salada y el hígado. Muchas personas obtienen suficiente vitamina D de forma natural, sin embargo, los estudios muestran que la producción de vitamina D disminuye en los ancianos y para la gente en general durante el invierno. Los adultos deben tener la ingesta de vitamina D de 600 UI (unidades internacionales) al día hasta 70 años de edad. Hombres y mujeres mayores de 70 años deben aumentar su absorción a 800 UI diarias.
    Ejercicio: Al igual que los músculos, los huesos son tejidos vivos que responden al ejercicio fortaleciéndose. Los ejercicios de carga es el mejor para los huesos, ya que te obliga a trabajar contra la gravedad. Los ejemplos incluyen caminatas, senderismo, correr, subir escaleras, pesas, tenis y bailar.
    Fumar: Fumar es malo para los huesos, así como su corazón y pulmones. Las mujeres que fuman tienen niveles más bajos de estrógeno en comparación con los no fumadores, y que a menudo pasan por la menopausia antes. Los fumadores también pueden absorber menos calcio en sus dietas.
    Alcohol: El consumo regular de alcohol puede ser perjudicial para el esqueleto, incluso en las mujeres y los hombres jóvenes. Aquellos que beben en exceso son más propensos a la pérdida ósea y fracturas, tanto por la mala alimentación y un por mayor riesgo de caídas.
    Medicamentos que causan pérdida de masa ósea: El uso a largo plazo de glucocorticoides (medicamentos prescritos para una amplia gama de enfermedades, incluyendo la artritis, el asma, la enfermedad de Crohn, el lupus y otras enfermedades de los pulmones, los riñones y el hígado) puede conducir a una pérdida de la densidad ósea y la fractura. La pérdida de hueso puede también resultar de largo plazo del tratamiento con ciertos medicamentos anticonvulsivos, como fenitoína (Dilantin) 1 y los barbitúricos, hormona liberadora de gonadotropina (GnRH), medicamentos utilizados para tratar la endometriosis y el uso excesivo de antiácidos que contienen aluminio, ciertos tratamientos del cáncer; y la hormona tiroidea excesiva. Es importante discutir el uso de estos medicamentos con su médico y no para detener o cambiar la dosis de medicamento por su cuenta.

    1 Las marcas incluidas en esta publicación se proporcionan sólo como ejemplos, y su inclusión no significa que estos productos están avalados por los Institutos Nacionales de Salud o de otra agencia gubernamental. Además, si una marca particular no se menciona, esto no significa ni implica que el producto es insatisfactorio.

    Los Síntomas de la Osteoporosis
    Los Síntomas de la Osteoporosis

    Los síntomas

    La osteoporosis se conoce como una enfermedad silenciosa porque la pérdida de hueso ocurre sin síntomas. La gente puede no saber que tienen osteoporosis hasta que sus huesos se vuelven tan débiles que un golpe, dolor, o caída causa una fractura de la cadera o a una vértebra se colapse. Vértebras colapsadas inicialmente puede sentirse o verse en forma de dolor de espalda severo, pérdida de altura, o deformidades de la columna como la cifosis (gravemente postura encorvada).

    Detección

    Tras una evaluación médica completa, el médico puede recomendar que se haga una medida de la masa ósea. Una densidad mineral ósea (DMO) es la mejor manera de determinar la salud ósea. Las pruebas de densidad mineral ósea puede identificar la osteoporosis, determinar el riesgo de fracturas (huesos rotos), y medir su respuesta al tratamiento de la osteoporosis. El más reconocido es una prueba de densidad ósea absorciometría de energía dual de rayos X, o examen de DXA. Es indoloro, un poco como tener una radiografía, pero con mucha menos exposición a la radiación. Se puede medir la densidad ósea en la cadera y la columna vertebral. Las pruebas de densidad mineral ósea puede:
    • Detectar la densidad ósea baja antes de que ocurra una fractura.
    • Confirmar un diagnóstico de osteoporosis si ya tiene una o más fracturas.
    • Predecir la probabilidad de fracturas en el futuro.
    • Determinar la tasa de pérdida ósea, y vigilar los efectos del tratamiento si la prueba se lleva a cabo a intervalos de un año o más.

    Tratamiento

    Un programa de tratamiento de la osteoporosis integral incluye un enfoque en la nutrición adecuada, ejercicio, y las cuestiones de seguridad para evitar caídas que pueden dar lugar a fracturas. Además, su médico puede recetarle un medicamento para disminuir o detener la pérdida ósea, aumentar la densidad ósea y reducir el riesgo de fractura.
    Nutrición: Los alimentos que comemos contienen una variedad de vitaminas, minerales y otros nutrientes importantes que ayudan a mantener nuestro cuerpo sano. Todos estos nutrientes son necesarios en proporción equilibrada. En particular, el calcio y la vitamina D son necesarios para tener huesos fuertes y para el corazón, los músculos y los nervios para funcionar correctamente. (Ver "Prevención" sección para las cantidades recomendadas de calcio.)
    Ejercicio: El ejercicio es un componente importante de una prevención de la osteoporosis y del programa de tratamiento. El ejercicio no sólo mejora la salud de sus huesos, sino que aumenta la fuerza muscular, la coordinación y el equilibrio, y conduce a una mejor salud en general. Aunque el ejercicio es bueno para una persona con osteoporosis, no debe poner ningún esfuerzo repentino o excesivo de los huesos. Como seguro adicional contra las fracturas, su médico puede recomendarle ejercicios específicos para fortalecer y apoyar su espalda.

    Medicamentos terapéuticos:
    Varios medicamentos están disponibles para la prevención y / o el tratamiento de la osteoporosis, incluyendo: los bifosfonatos, estrógenos agonistas y antagonistas (también llamados moduladores selectivos de receptores de estrógeno o SERM), la hormona paratiroidea, la terapia con estrógenos, la terapia hormonal, y un rango aprobado recientemente ligando (RANKL ) inhibidor.

    Prevención de caídas

    La prevención de caídas es una preocupación especial para los hombres y las mujeres con osteoporosis. Las caídas pueden incrementar la probabilidad de fracturarse un hueso en la cadera, la muñeca, la columna vertebral u otras partes del esqueleto. Además de los factores ambientales que se indican a continuación, las caídas también pueden ser causados ​​por problemas de visión o el equilibrio, las enfermedades crónicas que afectan el funcionamiento mental o físico, y ciertos medicamentos, como sedantes y antidepresivos. Es importante que las personas con osteoporosis esten al tanto de los cambios físicos que afectan el equilibrio o la marcha, y discutir estos cambios con su encargado de atención médica. Estos son algunos consejos para ayudar a eliminar los factores ambientales que conducen a las caídas.
    Al aire libre:
    • Use un bastón o un andador para mayor estabilidad.
    • Use zapatos con suela de goma para la tracción.
    • Caminar en la hierba cuando las aceras son resbaladizas.
    • En invierno, llevar sal o arena para gatos para rociar en las aceras resbaladizas.
    • Tenga cuidado en pisos altamente pulidos que se convierten en resbaladizos y peligrosos cuando están mojados.
    • El uso de alfombra o moquetas en los corredores cuando sea posible.
    En el hogar:
    • Mantenga las habitaciones libres de obstáculos, especialmente en los pisos.
    • Mantenga las superficies de suelo liso, pero no resbaladizos.
    • Use de apoyo, zapatos de tacón bajo, incluso en casa.
    • Evite caminar en calcetines, medias o zapatillas.
    • Estar seguro de que alfombras y tapetes tienen antideslizante o están pegados al suelo.
    • Que las escaleras estén bien iluminadas y que las escaleras tengan pasamanos en ambos lados.
    • Instale barras para agarrarse en las paredes de baño cerca de la bañera, ducha, y WC.
    • Use una alfombra de goma para el baño en la ducha o la bañera.
    • Mantenga una linterna con baterías nuevas al lado de su cama.
    • Si se utiliza un taburete ante la dificultad de llegar a zonas, use uno fuerte con pasamanos.
    • Añadir lámparas de techo en las habitaciones iluminadas por lámparas.
    • Considere la compra de un teléfono inalámbrico de modo que usted no tiene que apresurarse a contestar el teléfono cuando suene, o para que usted pueda llamar para pedir ayuda si usted se cae.